Resolución en Referencia a la Póliza Diocesana de Comida
Que Sea Resuelto en la Cita Anual Numero Ciento-Dieciocho de la Iglesia en la Diócesis de Los Angeles crear una póliza diocesana en la producción, distribución, y compromiso a la comida; y que sea extendido
R Resuelto que las iglesias, escuelas, y otras instituciones de la Diócesis se comprometan totalmente a usar todos sus recursos, u ofrecérselos a los compañeros de la comunidad para usarlos en la producción y distribución de comida para los vecinos que los necesiten; y que sea extendido
Resuelto que siempre que se sirva o distribuya la comida- en bodegas de comida, programas de alimentación, reuniones sociales, hora del café, escuela dominical, actividades de jóvenes, etc. – las iglesias, escuelas, y otras instituciones de la Diócesis se comprometan a ofrecer comida fresca y nutritiva; y que sea extendido
Resuelto que las iglesias, escuelas, y otras instituciones de la Diócesis se comprometan a abstenerse de servir o distribuir comidas o bebidas bajas o sin valor nutritivo que contribuyan a la obesidad y mala salud.
Explicación: Dentro de la Diócesis Episcopal de Los Angeles, cuatro millones y medio de personas están viviendo en la pobreza; tres millones de personas, incluyendo un cuarto de todos los niños, sufren de hambre o inseguridad de comida, y dos tercios de las personas incluyendo un quinto de niños, están sobrepeso u obesos. Las tasas de obesidad han incrementado en un cincuenta por-ciento entre esos que sufren de pobreza e inseguridad de comida debido a la falta de accesibilidad de comida fresca y nutritiva a precios alcanzables. La obesidad causa problemas de salud o empeora la salud, incrementa los costos médicos, disminuye los ingresos, y acorta la vida de los afectados. Nosotros estamos obligados por nuestro convenio bautismal a buscar y servir a Cristo en todas las personas, amando a nuestros vecinos como a uno mismo, y a respetar la dignidad de cada ser humano. Porque nuestras iglesias, escuelas, y otras instituciones tienen terrenos y las comodidades con la capacidad de producir y distribuir comida, y son pobladas por personas que están dispuestas a ofrecer su tiempo, talento, especialidad, experiencia, y labor para producir y distribuir comida, esta resolución ha sido ofrecida como la póliza para la Diócesis.
Invitamos a los miembros de la sacristía de cada Iglesia en la Diócesis que por este medio adopte esta póliza y se cometan a implementarla a lo mejor de su habilidad moviéndose hacia adelante.
R Resuelto que las iglesias, escuelas, y otras instituciones de la Diócesis se comprometan totalmente a usar todos sus recursos, u ofrecérselos a los compañeros de la comunidad para usarlos en la producción y distribución de comida para los vecinos que los necesiten; y que sea extendido
Resuelto que siempre que se sirva o distribuya la comida- en bodegas de comida, programas de alimentación, reuniones sociales, hora del café, escuela dominical, actividades de jóvenes, etc. – las iglesias, escuelas, y otras instituciones de la Diócesis se comprometan a ofrecer comida fresca y nutritiva; y que sea extendido
Resuelto que las iglesias, escuelas, y otras instituciones de la Diócesis se comprometan a abstenerse de servir o distribuir comidas o bebidas bajas o sin valor nutritivo que contribuyan a la obesidad y mala salud.
Explicación: Dentro de la Diócesis Episcopal de Los Angeles, cuatro millones y medio de personas están viviendo en la pobreza; tres millones de personas, incluyendo un cuarto de todos los niños, sufren de hambre o inseguridad de comida, y dos tercios de las personas incluyendo un quinto de niños, están sobrepeso u obesos. Las tasas de obesidad han incrementado en un cincuenta por-ciento entre esos que sufren de pobreza e inseguridad de comida debido a la falta de accesibilidad de comida fresca y nutritiva a precios alcanzables. La obesidad causa problemas de salud o empeora la salud, incrementa los costos médicos, disminuye los ingresos, y acorta la vida de los afectados. Nosotros estamos obligados por nuestro convenio bautismal a buscar y servir a Cristo en todas las personas, amando a nuestros vecinos como a uno mismo, y a respetar la dignidad de cada ser humano. Porque nuestras iglesias, escuelas, y otras instituciones tienen terrenos y las comodidades con la capacidad de producir y distribuir comida, y son pobladas por personas que están dispuestas a ofrecer su tiempo, talento, especialidad, experiencia, y labor para producir y distribuir comida, esta resolución ha sido ofrecida como la póliza para la Diócesis.
Invitamos a los miembros de la sacristía de cada Iglesia en la Diócesis que por este medio adopte esta póliza y se cometan a implementarla a lo mejor de su habilidad moviéndose hacia adelante.